La mayoría de nosotros nunca tendrá, por muy larga y aventurada que sea nuestra vida, la oportunidad de nadar cerca de una enorme ballena azul; no sólo porque quedan pocas y las siguen matando a pesar de los esfuerzos de organizaciones como Greenpeace y otras, tal vez menos conocidas pero no por ello menos importantes, si no también por lo difícil y costosa que resultaría tal aventura.
Por esta razón me pareció que debía compartir con ustedes esta curiosidad que he encontrado paseando por internet porque con un poquito de imaginación y salvando la obvia diferencia con la emoción de la realidad quiero sumergirme con todos los que me visitan y, como yo, sueñan con estar tan cerca de una ballena real como para tocarla y sentir la enormidad de su belleza.
En este vínculo que les propongo: "Ballena Tamaño Real" pueden, "navegando" igual que en Google Maps, recorrer el cuerpo de una ballena azul y tener (casi) la misma visión que tendrían si estuvieran a apenas unos palmos de una verdadera...
Apaguen las luces, aguanten la respiración, suban el volumen... y disfruten esta fantasía...
Por esta razón me pareció que debía compartir con ustedes esta curiosidad que he encontrado paseando por internet porque con un poquito de imaginación y salvando la obvia diferencia con la emoción de la realidad quiero sumergirme con todos los que me visitan y, como yo, sueñan con estar tan cerca de una ballena real como para tocarla y sentir la enormidad de su belleza.
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